Según el informe de la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) se indica que el 15,4% de los 18 millones de ecuatorianos sufren de hambre.
El estudio realizado hasta junio de 2022 informa que Ecuador es el segundo país de América del Sur, detrás de Sudamérica, que sufre de hambre.
Una de las causas para este incremento es la pandemia del COVID-19. En el 2019 se calculó que 828 millones de personas no se alimentaron. La FAO sostiene que la consecuencia que deja el hambre es la desnutrición infantil.
Erwin Ronquillo, Secretario Técnico del Ministerio de Inclusión Económica y Social (MIES), indica que el Gobierno tiene tres ejes para disminuir la desnutrición crónica infantil en el país.
- Mesas técnicas para analizar la problemática en los 221 cantones del país
- Brigadas universitarias para identificar de forma temprana a mujeres embarazadas y a niños menores de dos años para realizarles exámenes médicos
- Campañas sobre la importancia de una buena alimentación
La FAO tiene como objetivo que la falta de hambre baje con su plan “Hambre Cero” para el 2023. Se aspira que esta meta no llegue a ser lejana.
