En Quito, atravesar un puente peatonal se ha vuelto una actividad peligrosa. Escaleras rotas, estructuras oxidadas y escasa iluminación son parte de los problemas que afectan a peatones, especialmente a personas con movilidad reducida, niños y adultos mayores.
Puentes en mal estado: entre la inseguridad y la necesidad
Milena Caicedo, habitante del sector de la avenida 6 de Diciembre, utiliza diariamente un paso peatonal para proteger a sus hijos. Sin embargo, admite que la estructura está deteriorada y carece de iluminación:
Situaciones similares ocurren en otras zonas. En la avenida Galo Plaza Lasso, moradores prefieren arriesgarse cruzando por la vía debido al colapso de las escaleras:
Más allá del mantenimiento: un problema de diseño estructural
El experto en seguridad vial, Guillermo Abad Zamora, sostiene que estos pasos elevados son excluyentes desde su diseño, sin considerar las necesidades de personas con discapacidad o movilidad limitada:
La falta de accesibilidad puede llevar a consecuencias graves, como el incremento de atropellamientos:
Sin respuesta oficial
Este medio solicitó una entrevista a la Empresa Pública Metropolitana de Movilidad y Obras Públicas (EPMMOP), sin obtener respuesta hasta el cierre de este reportaje.
Mientras no se intervenga esta infraestructura, miles de quiteños seguirán cruzando entre el deterioro y la oscuridad, expuestos a riesgos que podrían prevenirse con acciones planificadas y sostenidas.
