Manifestantes en toda Francia iniciaron huelgas este martes 31 de enero contra los controvertidos planes de reforma de pensiones del Gobierno. Las escuelas y las redes de transporte se ven afectados por segunda vez en enero del 2023.
Los sindicatos y los partidos de oposición hicieron un llamado a la gente a protestar en las principales ciudades de Francia. Esperan que se repita la primera gran manifestación contra los planes del 19 de enero, cuando participaron más de un millón de personas. Las huelgas de ese día paralizaron la red de transporte y cerraron la Torre Eiffel a los visitantes.
En Marsella, al sur del país, la gente salió a las calles para protestar contra el plan del Gobierno de elevar la edad de jubilación a 64 años. Los manifestantes caminaron lentamente por el puerto de la ciudad con banderas rojas con los logotipos de los sindicato.
Están previstas 248 protestas en todo el país, dijo este martes Philippe Martínez, líder de una de las mayores confederaciones de sindicatos de Francia.
A pesar de la acción masiva, el Gobierno del presidente Emmanuel Macron se mantiene firme en las reformas de pensiones planificadas, que aumentarán gradualmente la edad a la que los ciudadanos franceses pueden cobrar una pensión estatal de 62 a 64 años.
Este domingo, la primera ministra Élisabeth Borne dijo que elevar la edad de jubilación “no es negociable”, durante una entrevista en la estación de televisión nacional France Info.
El Gobierno asegura que la legislación es necesaria para hacer frente a un déficit de financiación, pero las reformas han enojado a los trabajadores en un momento en que los costos de vida están aumentando.
