(CNN) — El miércoles 27 de noviembre, Estados Unidos impuso nuevas sanciones a más de 20 funcionarios del régimen de Nicolás Maduro en Venezuela, incluyendo oficiales de la Guardia Nacional y la Policía Bolivariana. Esta medida busca presionar a Maduro para que acepte los resultados de las elecciones presidenciales de julio de 2024, que fueron reconocidas por EE.UU. como fraudulentas.
El anuncio se produce cuatro meses después de los comicios, que dieron la victoria a Edmundo González, líder de la oposición, quien fue reconocido como presidente electo por EE.UU. en la semana anterior. Washington ha expresado su compromiso con la democracia en Venezuela, responsabilizando al régimen de Maduro por la represión política y la subversión de la voluntad popular.
A pesar de las sanciones, las licencias que permiten operar a empresas como Chevron en el sector petrolero venezolano se mantienen, aunque están bajo revisión. Funcionarios de la administración Biden aseguraron que las medidas son parte de su estrategia para promover la transición democrática en Venezuela.